sábado, 27 de marzo de 2010

Sueño vigésimo: Caaaaaaaaaaa

Cuando cogí el avión de vuelta para Palma llevaba ya veintitrés horas sin dormir, y me había recorrido el treayecto Glasgow-Fort William-Inverness-Stirling-Glasgow (unos 600 km) en unas diez horas repletas de mareo de autobús (debo mencionar aquí que nuestro chófer, Alaistair, es el conductor de autobuses más simpático que conocerse pueda). Cerré los ojos, escuchando a las azafatas de vuelo hablar en inglés sobre las medidas de seguridad que tomar para el viaje. Para mi sorpresa, lo entiendo perfectamente.
Leche y cerdos. La leche que toman los cerdos no es del todo buena, así que deberíamos ayudarlos a dar una leche mejor para las matanzas... Haciendo algo. Es sólo que no recuerdo qué. Aunque después aparece un cerdo corriendo hacia una verja recortada en negro con dos tipos vestidos de Dimoni adorándolo con extraños movimientos de brazo.
Y es por eso, supongo, Freud quizá tenga la respuesta, que acabo pensando en la historia de Jack el Destripador.

martes, 23 de marzo de 2010

Sueño #35 - Súper Burger

Alguien ha organizado una gimcana por toda la ciudad. No sé cual es el objetivo de dicha gimcana, pero yo y amigos indefinidos participamos en ella tranquilamente sin otro motivo que pasar el rato.
Sin haber conseguido nada, nos paramos a comer en un Burger King, y como somos muchos ocupamos una gran mesa redonda. Empezamos a comernos nuestras hamburguesas, pero en ese momento vienen unos pijos con peluquines de risa y se instalan con todo el morro con nosotros. Les pedimos educadamente que se pongan en otra mesa, que la nuestra ya está muy ocupada, pero ellos se ponen pesaditos porque según ellos "esa es su mesa del burguer, y nadie nos la quita"
Indignada con los semejantes papanatas tocapelotas esos, veo que en la puerta del Burger un cartel pone: ¿Te está molestando alguien? No dudes en llamar a... ¡Súper Burger!
Le llamo, o le invoco o algo y aparece un señor muy cachas con unas mallas blancas de licra y el logotipo de una hamburguesa en la frente.
Inmeditamente, el pijo jefe intenta entablar una conversación con él para hecharnos a nosotros la culpa, pero es inglés y sólo me entiende a mí.
Muy satisfecha, le explico nuestro problema al señor, y éste no duda en hacer justicia: le tira una tarrina de salsa Deluxe en el ojo al Pijo Jefe.
Todos reímos.

Sueño #34 - Resident Evil

Me mudo a un piso ruinoso con algunos amigos. Creo que vivimos en una ciudad tipo Barcelona o Madrid; no estoy en casa. Nada más llegar empezamos a jugar a un juego de zombies de realidad virtual, en el que nosotros somos cazadores y nuestra casa ruinosa casi una jungla llena de mutantes podridos. Llevamos grandes armas y trajes militares. Sé que es un juego, pero siento mucho miedo. Siento a la vez diversión y emoción; cuando los zombies están cerca de mí siento mucho pánico. Pero cuando queremos podemos parar el juego dandole a Pausa.
Uno de mis amigos quiere salir para comprar. Es entonces cuando nos damos cuenta de que la puerta de la entrada no se abrirá hasta que no nos pasemos el juego. Estamos atrapados.

Claves
- Yo y los demás debemos ser estudiantes universitarios, pero no hacemos nada más que jugar al videojuego.
- Mis amigos me intranquilizan. Por una parte me lo paso bien con ellos, pero no confío en ellos y tengo la sensación de que cada vez que perdemos es por un fallo suyo. Todo está lleno de zombies, no normales, sino mutados.
- Nuestra casa es ruinosa; en la realidad virtual se añade vegetación que lo hace parecer una jungla. No tenemos habitaciones normales. Nos alimentamos de la comida que hay apilada en bosas del súper en un rincón. No es un entorno precisamente apto para vivir en él.
- El juego comienza como algo divertido, emocionante, para pasar el rato. Cuando llego a la conclusión de que estamos atrapadas siento rabia contra mí misma por haber comenzado a jugar, mezclado con pavor e intranquilidad.
- Mi objetivo es acabar la partida lo más rápido posible e irme de ahí.


Colores


Verdes militares sobretodo; nuestra ropa, armas y casa en general son de ese color. Las paredes son amarillentas, con manchas de humedad. Los zombies son impactantemente grises.

Otros

Una situación estudiantil parecida a la de Marte Explota http://almohadaexperimental.blogspot.com/2010/03/sueno-32-marte-explota.html

miércoles, 3 de marzo de 2010

Sueño #33 - Rosas que deberían ser para mí

Estoy en el pasado, a uno o dos años de diferencia del momento actual. Tengo un amigo que se llama Fran. Una parte de mí que corresponde con mi yo actual sabe que es mi novio (o lo será en el futuro), pero mi parte pasada lo ve sólo como un amigo. Entonces me cuenta que tiene que correr para regalarle un ramo de rosas a nuestra amiga Nayla, porque está enamorada de ella y quiere confesarle su amor después de que ella haya cantado en el festival. Después de esquivar a una familia de rumanos gitanos muy desagradables, llegamos al sitio en cuestión y Fran se declara, lo cual me produce una sensación de que algo va muy pero que MUY mal.
Entonces un tío que en 4 de ESO me acosaba me pide si le puedo agregar en facebook, a lo que yo le contesto con un sí que realmente es un no, porque se ve que en mi facebook está lleno de insultos hacia él, que obviamente, no quiero que vea.

martes, 2 de marzo de 2010

Sueño #32 - Marte explota

Estoy en el piso de estudiantes que comparto con Manu, Ana, Fran y Hiro Nakamura (?) y estamos entre todos tratando de preparar la cena. El pobre de Hiro Nakamura no se desenvuelve muy bien con los fogones, y además no tiene ni idea de cocina occidental, así que le intentamos dar algunas clases.
Mientras, mi madre me llama al móvil, lo cojo y me empieza a decir que se ha acabado todo, que me llama para despedirse, que el mundo ha llegado a su final. Lo dice con voz serena de persona que ha aceptado totalmente su destino.
Yo no puedo creerlo, no puede acabar todo así, tiene que haber algun error, le digo. Me dice que lo mire por internet, y en Google imágenes salen imágenes de Marte en llamas.
Entonces, cuando estoy en mi habitación todavía sin creerlo, me fijo que Fran está tumbado en mi cama, y de repente el mundo gira o cambia de dimensión y estoy ahí, tumbada de verdad, en el mundo real, mirando como Fran duerme.
Caigo en la cuenta de que ha sido un sueño, Marte no va a explotar. Cierro los ojos con alivio.
Y estoy ahí otra vez, enfrente del ordenador observando aterrada las imágenes del planeta en llamas. ¿Qué es real y qué es un sueño? Cada vez que parpadeo veo una realidad diferente y se me hace imposible distinguir cual es la verdadera.
Finalmente reúno fuerzas para despertarme completamente y abrazar a Fran por detrás.
De momento, Marte no explota.


Claves

- Yo soy una estudiante universitaria, imagino, sin muchas más preocupaciones que mantener en pie una casa desastrosa. La situación cambia al acabarse el mundo, claro.
- Manu, Ana y Hiro Nakamura me transmiten un entorno amigable, sencillo y casero. Me gusta vivir con ellos y nos lo pasamos muy bien juntos.
- Vivimos en una casa desordenada, un poco destartalada y polvorienta, pero es nuestra casa y nos gusta. Mi habitación por el contrario es oscura, fría y claustrofóbica.
- Al principio me siento relajada; al saber que el mundo está en sus últimas me siento totalmente incrédula, con un enorme nudo en la garganta que no me permite asimilar muy bien lo que realmente está ocurriendo.
- Mi objetivo es despertarme y huir de allí.

Colores

Nuestra casa es de tonos azulados, la luz blanca. Mi habitación es negra, casi no deja entrar la luz, y las imágenes de Marte en explosión son rojo sangriento, naranja mortal.

Otros

Muy parecido a "Apocalypse Now" http://almohadaexperimental.blogspot.com/2009/08/sueno-11-apocalypse-now.html . En ambos está a punto de producirse el apocalipsis, y en ambos éste es una noticia que sé a través de mi familia, por lo tanto se produce una relación Apocalipsis - Familia un tanto perturbadora.