sábado, 27 de marzo de 2010

Sueño vigésimo: Caaaaaaaaaaa

Cuando cogí el avión de vuelta para Palma llevaba ya veintitrés horas sin dormir, y me había recorrido el treayecto Glasgow-Fort William-Inverness-Stirling-Glasgow (unos 600 km) en unas diez horas repletas de mareo de autobús (debo mencionar aquí que nuestro chófer, Alaistair, es el conductor de autobuses más simpático que conocerse pueda). Cerré los ojos, escuchando a las azafatas de vuelo hablar en inglés sobre las medidas de seguridad que tomar para el viaje. Para mi sorpresa, lo entiendo perfectamente.
Leche y cerdos. La leche que toman los cerdos no es del todo buena, así que deberíamos ayudarlos a dar una leche mejor para las matanzas... Haciendo algo. Es sólo que no recuerdo qué. Aunque después aparece un cerdo corriendo hacia una verja recortada en negro con dos tipos vestidos de Dimoni adorándolo con extraños movimientos de brazo.
Y es por eso, supongo, Freud quizá tenga la respuesta, que acabo pensando en la historia de Jack el Destripador.

1 comentario:

  1. Cerdos, demonios, Jack el Destripador....¿El viaje a Escocia ha sido el último paso para culminar tu paso al lado oscuro? xDD

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